use left or right arrow keys to navigate the tab,
Page First page Last page More pages Next page Previous page
Press Enter or Space to expand or collapse and use down arrow to navigate to the tab content
Click to read more about this recipe
Includes

Recibe nuestras deliciosas recetas

¡Me Apunto!
Your webbrowser is outdated and no longer supported by Microsoft Windows. Please update to a newer browser by downloading one of these free alternatives.
Reducir el consumo de sal (sodio) puede ayudar a disminuir la presión arterial, lo cual ayuda a que el corazón se mantenga sano. Dado que la mayoría sobrepasamos la cantidad diaria recomendada de sal (5 gramos o una cucharilla de café) deberíamos reducirla.

Siempre puedes intentar incluir especias o hierbas aromáticas para dar más sabor a las comidas, es increíble lo rápido que se adapta el paladar a los cambios en la alimentación; si reduces la ingesta de sal de forma gradual, no notarás la diferencia.

Aquí te proponemos 9 sencillos consejos para reducir la sal en tu alimentación:

Cocina sin sal

Así podrás controlar la cantidad de sal que añades a cada receta. Busca recetas con ingredientes integrales y con altos contenido en fibra y bajos en grasa y tendrás un corazón sano.

Esconde el salero

Intenta no echar sal al agua cuando cuezas patatas, pasta o arroz. Cuando comas, deja visible el pimentero sobre la mesa y esconde el salero. Si al cocinar utilizas sal, que sea baja en sodio.

Olvídate de los embutidos

Hazte sándwiches con carnes asadas, queso fresco o verduras a la plancha en lugar de usar embutidos, que contienen mucha sal.

Utiliza ingredientes frescos o congelados

Al cocinar, utiliza verduras frescas o congeladas y legumbres, siempre que puedas. Si cocinas con verduras o legumbres enlatadas, enjuágalas antes para eliminar parte de la sal que se les ha añadido.

Lee la lista de ingredientes y la etiqueta con la información nutricional

No te olvides de leer las etiquetas. Con bastante frecuencia, no aparecerá la cantidad de sal que contienen, sino el sodio (6 gramos de sal equivalen a 2,5 gramos de sodio). En los platos preparados, comprueba la cantidad por persona.

Compra la opción "baja en sal" de los alimentos

Busca en las etiquetas las palabras "sin sal", "bajo en sal", "sin sodio" o "bajo contenido en sodio". Presta especial atención a los quesos (cuanto más curados más sal y grasa tienen), embutidos, jamón, cereales de desayuno y snacks de aperitivo, así como a los productos en salmuera (aceitunas, pepinillos, etc). Dentro de la gama Flora Sin Sal para aquellos que necesitan seguir una dieta baja en sodio.

Añade sabor a tus comidas

Experimenta con diferentes especias y hierbas aromáticas para darle sabor a tus platos sin necesidad de excederte con la sal.

Vigila lo que comes entre horas

No tomes aperitivos salados y evita alimentos procesados como nachos, patatas fritas, galletas saladas, queso o embutidos. En su lugar, toma fruta fresca, frutos secos, pan o galletas dulces o sin sal.

Sé paciente

Tus papilas gustativas tardarán un tiempo en acostumbrarse a los alimentos bajos en sodio y los platos con menos sal, ¡pero finalmente lo harán! Y recuerda, cada pequeño cambio será un paso hacia una mejor salud cardiovascular.